Un odontólogo es condenado al aplicar a una paciente un tratamiento erróneo
El Juzgado de lo Penal nº 2 de Valladolid ha condenado a un odontólogo por un delito de lesiones “por imprudencia menos grave” al aplicar un tratamiento dental que ha ocasionado “gravísimos daños” en una mujer de 60 años en un tratamiento realizado en 2011. La indemnización asciende a un total de 94.884 euros.
La víctima, cuya visita al odontólogo condenado provenía de una recomendación de una compañera de trabajo, aceptó el tratamiento de implantes dentales propuesto por el profesional, previa extracción de la totalidad de sus dientes. Por ello, la paciente ha sufrido la pérdida de sus dientes naturales, modificando su estética facial y provocando un envejecimiento prematuro junto con una pérdida de masa ósea.
Los riesgos eran evidentes, la paciente sufría enfermedad periodontal, tabaquismo, y poca higiene venta, y el doctor cometió la imprudencia de no realizar un TAC , ni tratar previamente la enfermedad periodontal.
Tal y como indica el fallo de la sentencia, en tres años de tratamiento, el doctor ha sido incapaz de colocar una prótesis en los 11 implantes que él mismo instaló, bien por una deficiente angulación de algunos de ellos (alguno colocado incluso fuera del hueso) o bien por la movilidad en otros.